Según indicó hoy en un comunicado el Ministerio del Interior, han sido afectadas 10 empresas de seguros de carácter nacional e internacional a las que contrataron diversas pólizas por el envío de bultos que después reclamaban tras fingir su pérdida.

La investigación comenzó cuando los agentes recibieron varias denuncias de compañías aseguradoras en las que exponían que habían sido víctimas de un fraude que ascendía a dos millones de euros.

Con esta información, los policías averiguaron que un grupo de personas asentadas en Canarias se dedicaba a asegurar el traslado internacional de una mercancía de gran valor económico a varias compañías aseguradoras.

Una vez que firmaban la póliza, los detenidos fingían su extravío para poder ser indemnizados con el dinero del seguro y volvían a utilizar ese mismo objeto para realizar de nuevo el fraude.

Estos supuestos estafadores, además, fingían el extravío utilizando diversos argumentos como, por ejemplo, la falta de etiquetado para convencer a las compañías de su propósito.

Asimismo, para evitar ser detectados los detenidos regentaban negocios de comercio al por menor que les servían de tapadera para justificar su actividad comercial internacional.

Finalmente, la operación fue resuelta por la Brigada Central de Delincuencia Económica y Fiscal de la UDEF Central perteneciente a la Comisaría General de Policía Judicial y la Jefatura Superior de Policía de Las Palmas de Gran Canaria, con la detención de estos cinco individuos, tres de ellos en las Palmas de Gran Canaria y dos de Lanzarote.