Según indicó hoy en un comunicado la Guardia Civil, en la 'operación Cuprutel' la Benemérita ha detenido a 10 integrantes de la red y otros ocho a los que se les imputa delitos de robo, recepción de cable de cobre y pertenencia a grupo criminal, ya que están implicados en 22 hechos delictivos.

Las investigaciones comenzaron a raíz de los servicios y controles que realiza el Instituto Armado en los establecimientos para evitar la compra de cable de cobre de procedencia ilícita.

Gracias a estas vigilancias se identificó al grupo que efectuaba los robos, que estaba integrado por ciudadanos de origen rumano. Asimismo, en el transcurso del operativo la Benemérita interceptó un camión con 25.640 kilogramos de cable de cobre que iban a ser exportados a Inglaterra por los detenidos.

La mayor parte del metal recuperado procedía de robos de cable telefónico. Para la identificación del cable, la Guardia Civil contó con el apoyo de técnicos especializados de las empresas afectadas, principalmente de la compañía Telefónica.

160.000 EUROS

En la 'operación Entera', llevada a cabo en Valencia, se detuvieron a 60 personas de nacionalidades rumana y española por su implicación en la sustracción de cerca de 120 toneladas de material metálico como cobre, aluminio y latón, procedente de la empresa en la que trabajaban los detenidos.

Los agentes realizaron más de 30 inspecciones en chatarrerías de esta provincia, lo que les permitió comprobar que en 13 de ellas los detenidos habían realizado numerosas ventas de materiales metálicos, por los que obtuvieron un gran beneficio económico.

Los ahora detenidos llegaron a vender este material en más 600 ocasiones en distintas chatarrerías, consiguiendo con ello un valor de 160.000 euros.