Así lo dijo, en declaraciones a Servimedia, el responsable de Comunicación de esta entidad a favor de la independencia, Ferran Civit, una vez que el Constitucional ha admitido a trámite el recurso que la Abogacía del Estado presentó el pasado viernes, lo que lleva de forma automática a la suspensión de la consulta en virtud del artículo 161.2 de la Constitución española.

“Es una suspensión simbólica porque es imposible suspender realmente la voluntad de un pueblo”, aseveró Civit, quien se mostró convencido de que el pueblo catalán “se terminará expresando por las urnas” y votando sobre una posible independencia de este territorio con respecto al Estado español.

Asimismo, remarcó que el próximo 9-N los catalanes van a ir a “hacer cola desde las nueve de la mañana para votar, segurísimo”, al tiempo que explicó que en este proceso cada cual tiene su papel y el del Gobierno de Artur Mas es “poner las urnas” y el de los ciudadanos es “poner las papeletas dentro de las urnas”.

LLEVAR EL PROCESO “HASTA EL FINAL”

Asimismo, reclamó al Ejecutivo catalán que “esté a la altura de las circunstancias históricas y de la voluntad del pueblo de Cataluña” y que, pese a la prohibición del Alto Tribunal, cumpla con su promesa de “ejecutar y llevar este proceso hasta el final”.

En esta línea, subrayó que la ANC “no contempla otro escenario” que no sea el de acudir a votar el 9-N y aseguró que la llamada a votar sigue intacta. “El 9-N no es una fecha cualquiera en el calendario. Para nosotros es un gesto de acción democrático”, concluyó.

El Tribunal Constitucional admitió hoy a trámite el recurso del Ejecutivo central, avalado previamente por un informe del Consejo de Estado, en el que se determinaba la existencia de fundamentos jurídicos para plantear la impugnación del proceso.

El Pleno del Constitucional consideró por unanimidad que el “proceso participativo” que promueven los partidos soberanistas para el 9 de noviembre está fuera de la ley, en línea con los argumentos esgrimidos por el Consejo de Estado.