La primera ocasión fue al principio de su parlamento, cuando afirmó que presidía por primera vez este evento como Rey de todos españoles. Durante cerca de un minuto todos los asistentes se pusieron en pie para aplaudir al Monarca e incluso salió una voz anónima que pidió un viva el Rey, que fue coreado y un viva España. El Rey, visiblemente emocionado, al igual que doña Leticia, agradecio el cariño manifestado por los asistentes.

La segunda ocasión en la que los aplausos callaron la voz del Rey fue cuando agradecio a su madre su presencia en el acto. Hubo otras dos interrupciones mas, cuando se refirió a los españoles que luchan contra el ébola y cuando hablo de la unidad de España con la frase en la que dijo que los españoles no son rivales sino protagonistas de un mismo camino.

La anécdota se produjo al final del acto, cuando convocó los Premios Príncipes de Asturias 2015, en vez de los Premios Princesa de Asturias. Su lapsus fue subsanando enseguida y la Reina le dio un cariñoso beso.