En declaraciones a los medios de comunicación tras entregar el manifiesto, el secretario de Protección Social y Políticas Públicas de CCOO, Carlos Bravo, criticó también el proyecto de presupuestos para el próximo año, ya que asegura que “están llamados a incumplir los compromisos básicos” que el Gobierno adoptó con la población de más edad.

En concreto, se refirió a la Ley de Dependencia que en julio del próximo año “debe estar plenamente desarrollada” con las prestaciones de medio millón de personas en grado uno “reconocidas” y con 276.000 personas “en lista de espera”.

Sin embargo, Bravo afirmó que “no hay partida presupuestaria para ello”, como tampoco para “financiar los compromisos del 29 de julio” del presidente del Gobierno con los agentes sociales, que incluye el refuerzo de la protección social a los parados.

Por esta razón, advirtió que si el Ejecutivo quiere cumplir con estos compromisos será necesario que el proyecto de presupuestos “sea modificado de forma relevante en el Congreso”.

Por su parte, la responsable de esta área en UGT, Carmen López, aseveró que “lo único que hacen estos presupuestos es endurecer aún más la pobreza de nuestros mayores”.

En su opinión, los presupuestos diseñados por el Ejecutivo “acentuarán aún más el paro y no apoyarán la recuperación económica”.

En este sentido, auguró que “si no se activa realmente el empleo, se suben los salarios, y se hace la reforma fiscal que se necesita, el sistema público de pensiones volverá a tener problemas este año”.

También se refirió a la situación de la sanidad, cuya mesa de diálogo social se reúne este miércoles. Sobre esta área, sostuvo que los presupuestos “están muy lejos” de la financiación “que necesita este país”.

Además de los responsables confederales en materia de pensiones, también se dirigieron a los medios de comunicación los secretarios generales de las federaciones de pensionistas de ambos sindicatos, Julián Gutiérrez de CCOO y Juan Cerrillo de UGT.

Gutiérrez mostró su “preocupación por la difícil situación en la que estamos”, con unas pensiones “muy bajas” que sólo subirán un 0,25% “durante los próximos tres años”. En su opinión, ésta es “una dificultad muy grande, más cuando mantenemos también a nuestros hijos y nuestros nietos”.

Por su parte, Cerrillo centró sus críticas en la reforma del régimen local, que entrará en vigor el próximo 1 de enero y que “hará que los ayuntamientos expulsen a más de 20.000 trabajadores que se dedican a la ley de dependencia”.

Esta reforma supondrá además, según el dirigente de UGT, el “desmantelamiento total de los servicios sociales comunitarios en los ayuntamientos, cuando lo que tendrían que hacer es potenciarlos”.