El presidente del Consejo General del Poder Judicial y el Tribunal Supremo, Carlos Lesmes, dijo en presencia del rey Felipe VI que durante el pasado año se dictaron 1.571.391 sentencias por los distintos órganos judiciales españoles.

En ese período los distintos tribunales resolvieron más asuntos de los que entraron en registro. Entraron 8,6 millones de asuntos y se revolvieron casi nueve millones. Además, la duración media estimada de los distintos procedimientos se sitúa ya por debajo de los 12 meses.

Este éxito, que Lesmes atribuyó a la “laboriosidad” de los tribunales y juzgados, es motivo de “satisfacción” para la judicatura española que entre otros logros ha conseguido, dijo, que los tiempos de resolución de de recursos por el Tribunal Supremo estén a la “vanguardia” de los tribunales de casación europeos.

De hecho, destacó, la Sala de lo Contencioso Administrativo tiene un promedio de respuesta de 15 meses aún estando sometida a “importantes cargas de trabajo” y la Sala de lo Penal está “ en el meritorio promedio de apenas seis meses en tiempo de respuesta”.