Buendía explicó que las personas que sufren un infarto de miocardio registraron el año anterior modificaciones importantes en su actividad laboral, como cambios de horario o de responsabilidades, problemas con el jefe y con sus compañeros, o jubilaciones, que resultan particularmente traumáticas cuando se aplican contra la voluntad del trabajador.

Los trabajadores que más ven afectada su estabilidad ardiaca por sus condiciones de trabajo son los empleados nocturnos y los sometidos a continuos cambios de horarios, que "son los que más se quejan de que su actividad laboral altera su vida privada".

Buendía agregó que en las últimas décadas se ha registrado un aumento de lo que denominó enfermedades de "adaptación", asociadas al estrés laboral, en paralelo con el descenso de las patologías infecciosas.

En las jornadas coordinadas por Buendía participarán un total de 17 especialistas de las princpales universidades de Australia, Estados Unidos, Cuba, Reino Unido, Suecia, Holanda y España, que abordarán problemas como el "burnout" (estar quemado) y la adicción al trabajo.