Según informó este martes la Guardia Civil, cuatro de los detenidos en la denominada ‘Operación Chaleco’ son españoles, 11 son de origen guineano, uno senegalés y otro de Cabo Verde. El cabecilla del grupo residía en Lanzarote, donde regentaba un locutorio en el que se recibían continuas partidas de droga procedentes de diferentes países de Europa.

El jefe de la organización se encargaba de reclutar a las 'mulas' que introducían la droga en las Islas Canarias. Para ello, utilizaban diferentes escalas en aeropuertos nacionales e internacionales y desplazamientos en barco entre las distintas islas del archipiélago con el fin de eludir los posibles controles policiales.

Asimismo, se han desmantelado dos puntos de distribución y venta de heroína ubicados en La Laguna y Santa Cruz de Tenerife. Con estas detenciones, la Guardia Civil da por desarticulada totalmente la organización.

Los agentes practicaron siete registros, en los que se intervinieron 3,5 kilos de heroína y 1,5 kilos de cocaína, 5 kilos de sustancia de corte para adulterar la droga, 34.650 euros en efectivo, 30.000 francos guineanos en efectivo, un tasser (arma eléctrica), una defensa extensible, tres sprays de defensa, un vehículo y numerosos útiles para preparar dosis de droga.

La operación se inició hace un año tras tener conocimiento de la actividad delictiva de una organización dedicada a la distribución de heroína en la isla de Tenerife, lo que había creado una gran alarma social.

En la operación han participado especialistas en investigaciones contra el crimen organizado de la Guardia Civil, con el apoyo de otras unidades de las comandancias de Tenerife y Las Palmas de Gran Canaria y de grupos de reserva y seguridad de este cuerpo.