No obstante, el INE apunta que si se restan las subvenciones y deducciones que se recibieron de las administraciones públicas, se obtiene un coste neto de 30.686,71 euros, lo que supone un incremento interanual del 0,1%.

Como es habitual, los sueldos y salarios, más las cotizaciones a la Seguridad Social, constituyeron la mayor parte del coste laboral, representando conjuntamente el 95,8% del total.

Además de los salarios y cotizaciones, 456,84 euros anuales se destinaron a beneficios sociales por trabajador (cotizaciones voluntarias a seguros y planes de pensiones, prestaciones complementarias a la Seguridad Social y gastos de carácter social), 294,49 euros a otros gastos derivados del trabajo (indemnizaciones por fin de contrato, pequeño utillaje y ropa de trabajo o transporte hasta el lugar de trabajo, entre otros), 441,48 euros correspondieron a indemnizaciones por despido y 100,98 euros a formación profesional.

La industria, con un coste total neto por trabajador de 36.536,61 euros durante 2013 fue el sector económico con mayores costes laborales y también con el mayor incremento anual de los mismos (1,9%), experimentando ese mismo incremento tanto el coste salarial como el coste no salarial.

En el sector de la construcción el incremento del coste neto fue del 0,9% con respecto al año anterior. En este sector destacó el crecimiento del coste salarial (del 0,5%) y, especialmente, el del coste no salarial (1,8%).

Por el contrario, en los Servicios el descenso del coste neto fue del 0,3%, como consecuencia de la misma disminución en el coste salarial y no salarial.

Por actividades, el coste más bajo fue el de la hostelería, con 18.425,27 euros anuales brutos, mientras que el más alto fue el de suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado, con 81.750,49 euros.

Las mayores subvenciones y deducciones fiscales por creación de empleo y fomento de la formación profesional se obtuvieron en los otros servicios, mientras que las menores se presentaron en la educación. No obstante, el INE apunta que es la variable de coste que presenta menos dispersión respecto a la media.

Por tamaño, las empresas con 200 o más trabajadores pagaron mayores sueldos por trabajador que las empresas medianas y pequeñas, y, en consecuencia, también las cotizaciones a la Seguridad Social fueron mayores.

Por comunidades, el coste laboral más elevado se da en País Vasco (36.507,45 euros netos) y Madrid (36.141,62 euros), mientras que los más bajos fueron los de Extremadura (25.117,8 euros) y Canarias (25.254,81 euros).