El portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Francisco Martín León, explicó, en declaraciones a Servimedia, que “habrá una tendencia a estabilización atmosférica, de manera que se esperan tormentas puntuales en la parte oriental del Pirineo y algunos puntos de Cataluña durante el fin de semana”.

Martín León indicó que el tiempo estable continuará prácticamente toda la próxima semana, salvo el lunes, que podría registrar precipitaciones débiles a moderadas en todo el Cantábrico, los Pirineos y zonas de Cataluña.

Las temperaturas, que cayeron el viernes hasta cuatro grados en el noreste por la borrasca asociada a lluvias y tormenta, se recuperarán ligeramente este sábado en la mitad norte peninsular y Extremadura, con ascensos de hasta tres grados, y se mantendrán el domingo.

Los termómetros apenas experimentarán cambios el próximo lunes, descenderán ligera a moderadamente en gran parte de la península durante el martes y se mantendrán sin cambios el resto de la semana. “Las temperaturas seguirán siendo veraniegas, sin ser extremadamente altas, y no hay ola de calor a la vista”, apuntó el portavoz.

De esta forma, el verano continuará sin ola de calor en España, que sólo ha registrado un episodio de temperaturas altas entre el 14 y el 18 de julio, cuando los termómetros llegaron hasta los 42,2 grados en Montoro (Córdoba).

La Aemet considera ola de calor cuando durante al menos tres días consecutivos el 10% de las estaciones meteorológicas de una zona registran máximas por encima del percentil del 95% de su serie de temperaturas máximas diarias de los meses de julio y agosto del periodo entre 1971 y 2000, y esta situación aún no se ha producido en esta época estival.