Así lo señaló Pastor en la rueda posterior al Consejo de Ministros, en la que precisó que el clima de diálogo entre Adif y Renfe y los representantes de los trabajadores es “el habitual”.

La ministra pidió “responsabilidad” al tener lugar la convocatoria de los paros en unos días “muy importantes para muchos españoles” y “claves” para el turismo.

“El daño que se hace al país y a los intereses económicos y personales, a las personas que tienen previsto desplazarse para ver a sus familias y descansar, es tremendo”, apostilló Pastor, quien indicó no obstante que las “mesas siguen abiertas” y subrayó que “querría lograr que esa huelga no se lleve a efecto”.

De esta forma, tal y como se ha solicitado en anteriores huelgas de transporte, Pastor abogó por que “todo lo que se pueda hablar dialogando, hablando y entendiéndose no se vaya a perjudicar a quien no puede defenderse”, en referencia a los ciudadanos de España y los “millones de personas” que visitan el país en esas fechas.

La huelga en Renfe ha sido convocada por CCOO, CGT y el Sindicato Ferroviario (SF) para el 31 de julio, y para el 1 de julio por CGT y SF. Estos paros se suman al convocado por todo el Comité de Empresa de Adif para un total de 46 horas ininterrumpidas entre las 1.00 horas del 31 de julio y las 23.00 horas del 1 de agosto.