La Fundación Pelayo colabora desde hace años con la Asociación Talismán en el vivero que la entidad tiene en San Martín de Valdeiglesias (Madrid), donde chicos con discapacidad desarrollan sus capacidades y habilidades, favoreciendo así su integración social y laboral.

Como ya se hizo el año pasado, Fundación Pelayo ha querido un año más celebrar un encuentro en el que un grupo de cerca de 50 voluntarios, entre empleados de Grupo Pelayo y sus familiares, pudieran compartir un día con los chicos de la Asociación Talismán y ser partícipes de sus actividades, compartiendo con ellos sus trabajos diarios: limpieza de maleza, colocación de plantas y de mallas antihierba, preparación de jardineras y de un jardín vertical, etc.

Según informó Pelayo, los más pequeños también pudieron disfrutar de este día en familia, junto con los chicos de la asociación, compartiendo con ellos talleres de manualidades y jardinería y favoreciendo con ello la normalización de las actividades y su integración social.