El Banco de España decidió ampliar el plazo para las entidades de crédito a fin de evitar que éstas anticiparan el periodo del canje al público, fijado hasta el 4 de abril, para evitar quedarse con la moneda inservible sin posibilidad de devolción.

Además, la apliación del plazo se justifica por los problemas de organización y almacenamiento que se han detectado en las compañías de seguridad, entidades de crédito, en el Banco de España y en la propia Fábrica Nacional de Moneda y Timbre.

Esta última procederá a fundir las monedas viejas para utilizar el metal en la elaboración de nuevas monedas o para su venta mediante subasta.

Para los particulares, Caritas ofrece otra alternativa distinta al canje de monedas, que es donarlas a ls parroquias para dedicarlas a los sin techo.

Las monedas que serán inservibles son las de 100 pesetas de cuproniquel blanca, así como las de 50, 25 y 5 pesetas del mismo material; la de 200 pesetas hexagonal; las de 2 y 1 peseta de aluminio blancas; y la de 1 peseta de bronce y aluminio.

Por otra parte, una de las nuevas monedas introducida en sustitución de la peseta, la de 50, se ha convertido en motivo de polémica en Cataluña por contener la efigie de Felipe V, el primer rey Borbón de la histria de España, que acabó con las libertades del antiguo reino de Cataluña.

CiU ha pedido formalmente a la Generalitat que inste al Gobierno a retirar esa moneda. Además, las juventudes de CiU han puesto en marcha una campaña de retirada de esas monedas para que los ayuntamientos construyan con el dinero así recaudado una estatua a Josep Moragues, héroe de la Guerra de Sucesión asesinado en 1715 y cuya cabeza fue expuesta en el Portal del Mar, de Barcelona, dentro de una jaula, durante 12 años.