Así lo anunció la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.

Cuando se presentó la reforma fiscal, el Gobierno dijo que ese límite sería de 12.000 euros, si bien finalmente lo ha ampliado en 3.000 euros más.

Así, el tipo de retención de los profesionales autónomos baja del 21% al 15% para quienes tengan unos ingresos inferiores a los citados 15.000 euros, siempre que más del 75% de sus rentas procedan de actividades económicas.