Según informó este miércoles la Policía, el arrestado trabajaba para la empresa encargada de las reservas y alquileres del apartamento turístico en el que se alojaba la joven durante su estancia en la capital española. Además, los investigadores creen que el asesino conocía a la víctima.

El arresto se produjo cinco días después del homicidio en un bar situado en la calle Víctor Hugo, en el distrito Centro, y el detenido se confesó responsable del crimen y aportó datos esclarecedores a los investigadores que sólo el autor de los hechos podía conocer.

En la inspección realizada en el inmueble en el que fue asesinada la ciudadana danesa no se hallaron señales de forzamiento en las cerraduras, lo que hizo suponer a los agentes que el homicida o tenía llaves o era una persona conocida por la fallecida.

Los agentes de seguridad comprobaron que el arrestado fue uno de los encargados de realizar el registro de entrada de la mujer el 2 de junio, día en el que inició su estancia en una de las habitaciones de alquiler en el citado apartamento.