Mas y Urkullu están sentados en primera fila de la tribuna de invitados del Congreso de los Diputados, apenas a un par de metros de la reina doña Sofía y de la infanta Elena.

Cuando don Felipe de Borbón hizo su juramento como nuevo Rey de España, Posada grito "¡Viva el Rey, viva España!", que secundaron al unísono los más de 700 diputados y senadores presentes.

Ni Mas ni Urkullu secundaron los vivas del presidente del Congreso de los Diputados al nuevo Rey y a España ni tampoco aplaudieron cuando acto seguido sonó el himno nacional. Sin embargo, sí se sumaron a la ovación posterior al rey Felipe VI.

Asimismo, los presidentes de Cataluña y País Vasco también aplaudieron cuando don Felipe de Borbón mencionó en su discurso a las víctimas del terrorismo que han muerto a lo largo de cuatro décadas de atentados en España.

Cuando el nuevo Rey hizo mención a las lenguas cooficiales y las puso como ejemplo de la unidad plural de España, los asistentes al acto aplaudieron, pero no lo hicieron ni Mas ni Urkullu.