Así lo indicó este lunes en una rueda de prensa sobre trasplantes la ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, quien defendió la "proporcionalidad" y "responsabilidad" del Ejecutivo en la compra de las vacunas, ante las críticas de algunos sectores de que los gobiernos han actuado movidos por la presión de las farmacéuticas en la compra del preparado.

"Hemos actuado con total independencia y en total coordinación" con las decisiones adoptadas por las autoridades internacionales en lo referido a la adquisición de vacunas para combatir la gripe A, aseguró la ministra.

Es más, según Jiménez, si alguna crítica recibió su departamento por la gestión de este aspecto fue la de haber sido "restrictivo" en la compra de vacunas contra la gripe pandémica.

Con respecto a la campaña de vacunación, la titular de Sanidad señaló que hasta la fecha se han inmunizado cerca de tres millones de personas en España, lo que supone algo menos de la tercera parte de la población prevista, que asciende a más o menos nueve millones de ciudadanos.

En este sentido, Jiménez reconoció que el Gobierno no espera que se inmunicen más de tres millones de españoles, pero insistió en que los ciudadanos considerados de riesgo deben acudir a su centro de salud para que se les vacune.

Y es que, añadió, los expertos consideran que todavía podría haber un nuevo pico de casos de la gripe pandémica, por lo que subrayó que hay que "mantener la cautela" sobre las dosis sobrantes.

A este respecto, la ministra indicó que los especialistas están analizando el comportamiento de la gripe A, que al ser nueva no se conoce, para decidir en consecuencia qué hacer con las vacunas sobrantes, que podrían reservarse para la campaña del año que viene, ya que cabe la posibilidad de que puedan volver a necesitarse.