A través de un auto conocido este martes, el magistrado rechazó la solicitud de control telemático que había presentado la consejería vasca de Seguridad, que es la que tiene asignado la tarea de que se cumpla la prisión domiciliaria de Bolinaga.

En este sentido, el juez decide ordena mantener el control del etarra en su vivienda mediante las "medidas de vigilancia necesarias", lo que implica la presencia de agentes de la Policía autonómica. En su auto, el instructor rechaza el control telemático que planteaba el Gobierno vasco.

A este respecto, el Gabinete de Íñigo Urkullu argumentaba que la pulsera electrónica era un método de supervisión de Bolinaga "menos invasivo respetando el principio de proporcionalidad y sin reducir la eficacia en el control", además de evitar "cierta lesividad mediática en el entorno por la presencia de los agentes en el domicilio".

Sin embargo, el juez Moreno rechaza este procedimiento, puesto que no se ha producido "modificación alguna" de las circunstancias que se tuvieron en cuenta para acordar la prisión domiciliaria del terrorista.

"El hecho de que se estén llevando a cabo las oportunas medidas de vigilancia y control por parte de la Ertzaintza en modo alguno puede suponer ‘cierta lesividad mediática en el entorno’ -como se dice en el oficio policial- ni de lugar ‘agravar la situación del mismo ni el devenir diario de los vecinos del entorno’, como asimismo se reseña literalmente en el citado oficio policial", dice la resolución del juez”.