Según explica en un comunicado, la Universidad tomó esta decisión al conocer hoy la intervención en el caso de la Guardia Civil, que a través del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) inmovilizó los restos supuestamente retirados del citado departamento pese a la prohibición que el martes decretó Inspección de Trabajo.

La UCM decidió por tanto denunciar los hechos ante la fiscalía de Madrid, a fin de que investigue y aclare lo ocurrido en este departamento y se puedan “concretar las posibles responsabilidades”.

En la denuncia se detallan las fechas en las que, a través de los medios de comunicación, la universidad ha ido conociendo las “situaciones de excepcionalidad” ocurridas, así como las medidas adoptadas: apertura de información reservada, cese del director del departamento y apertura a este de un expediente disciplinario.