El TSJ de Madrid aparta a Tardón del juicio a Elpidio Silva, para "preservar la imagen de la justicia"

MADRID
SERVIMEDIA

La jueza María Tardón ha quedado apartada del juicio que sigue el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) contra el juez Elpidio José Silva, según ha decidido la denominada 'Sala 77', que estudiaba hoy, por tercera vez, la recusación de Tardón y de Arturo Beltrán, presidente del tribunal. Argumenta que lo hace para "preservar la imagen de la justicia", aunque no encuentra elementos que "cercenen su imparcialidad".

Los magistrados estiman que, aunque no concurre "elemento alguno que cercene su imparcialidad”, es preferible apartar a Tardón con el fin de “preservar la imagen de la Justicia y la confianza en los tribunales”.

La 'Sala del 77' del TSJ de Madrid ha entendido que ha lugar a la causa de recusación deducida contra la magistrada María Tardón en la vista oral que se sigue contra el magistrado Elpidio Silva. La magistrada queda por tanto apartada del conocimiento de la causa y será sustituida por el magistrado al que legalmente le corresponda.

Sin embargo, la Sala desestima la recusación promovida contra el magistrado y presidente del tribunal, Arturo Beltrán, que continuará en el conocimiento de la causa.

SUSTITUCIÓN DE TARDÓN

Queda ahora pendiente la decisión de sustitutir a Tardón. El nuevo tribunal que se forme tendrá que acordar si sigue el juicio contra Silva desde el punto en el que quedó o si inicia de nuevo el proceso desde el principio.

Los magistrados estiman en relación a Tardón que “no concurre elemento alguno que cercene su imparcialidad en relación al caso cuyo enjuiciamiento le compete como integrante del tribunal que lo ha de resolver”.

Además, considera que “no cabría entender que afloren circunstancias que evidencien aquel interés directo o indirecto en el pleito o causa que exige el artículo 219.10 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, y que es el esgrimido como causa de recusación, en este caso”, pese a lo cual, y “con el fin de preservar la imagen de la Justicia y la confianza que los tribunales deben inspirar a los ciudadanos”, “rebasar el estricto ámbito subjetivo para examinar si concurre asimismo el requisito de la imparcialidad objetiva proporciona una garantía más consistente, en orden a determinar si afloran hechos verificables que puedan crear dudas, siquiera indiciarias, o incluso aparentes, sobre la imparcialidad de la magistrada recusada”, como es el caso.

La denominada 'Sala del 77' del TSJM, formada por el presidente de lo Civil y Penal, de lo Social, de lo Contencioso-Administrativo, el magistrado más antiguo y el más moderno, sigue debatiendo ahora el procedimiento a seguir en este caso.

Silva consiguió paralizar su juicio tras recusar al presidente de la sala, Arturo Beltrán, y a la magistrada María Tardón. Durante la cuarta sesión del juicio el acusado presentó un incidente de nulidad contra Tardón por “representar” al PP en la Asamblea General de Caja Madrid, y contra Beltrán por su “falta de imparcialidad”, al permitir la presencia de esta jueza y rechazar en la primera jornada del juicio la renuncia de su abogado, Cándido Conde-Pumpido Varela. Además, Silva le acusó de apartar del tribunal a dos magistrados que con anterioridad conformaron la sala que le juzga.

En su reunión de hoy la 'Sala del 77' del TSJM tendrá también que decidir si acepta le petición de realizar una prueba pericial para comprobar si Tardón era afiliada al PP mientras ejercía de jueza y si pagaba cuotas al partido.

El juez Silva, antiguo responsable del Juzgado de Instrucción número 9 de Madrid, se sienta en el banquillo de los acusados por un presunto delito de prevaricación, retardo malicioso en la administración de la justicia y dos delitos contra la libertad de las personas en su investigación por el ‘caso Blesa’.

(SERVIMEDIA)
05 Mayo 2014
SGR/caa