Los desarrollos tecnológicos en osteointegración permiten a las personas con amputaciones hacer una vida “normal”
- Según especialistas que han participado en la primera Jornada de Osteointegración en Amputados
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Especialistas aseguran que los nuevos desarrollos tecnológicos basados en la osteointegración, una modalidad ortopédica que consiste en la colocación de implantes metálicos en la estructura ósea del paciente, mejoran “enormemente” su calidad de vida y hacen posible que su día a día sea “casi idéntico” al de una persona que no ha sufrido la pérdida de ningún miembro superior o inferior.
Así lo manifestaron este miércoles los especialistas reunidos en la primera Jornada de Osteointegración en Amputados, que se celebró en la Clínica La Luz de Madrid.
En el encuentro, el coordinador y responsable de la Unidad de Osteointegración en Amputados de la Clínica La Luz, Rafael Delgado Velilla, dijo que en España casi 80.000 personas viven sin algún miembro superior o inferior y estimó que, pese a los últimos avances en el desarrollo de prótesis para estas personas, todavía hay muchos afectados, sobre todo amputados femorales, que viven con muletas debido a los efectos secundarios que presentan las prótesis tradicionales, “que no permiten una unión funcional con la estructura ósea del paciente”.
Otro problema clásico de estas prótesis tradicionales, según explicó el doctor, es que al no hacer trabajar al fémur, acaban provocando un proceso de osteoporosis en el hueso más largo del cuerpo.
Delgado dijo que todos estos problemas desaparecen o se reducen “enormemente” gracias a los nuevos desarrollos tecnológicos basados en la osteointegración, una novedosa modalidad ortopédica que consiste en la colocación de implantes metálicos, sobre todo de titanio, que se integran "perfectamente" en la estructura ósea del paciente reproduciendo con la mayor fidelidad los movimientos naturales del mismo y evitando a la persona los dolores y problemas musculares y óseos que conllevan las técnicas tradicionales.
“La comodidad y práctica ausencia de efectos secundarios mejoran enormemente la calidad de vida del paciente y hacen posible que su día a día sea en la práctica casi idéntico al de una persona que no ha sufrido la pérdida de ningún miembro”, destacó el doctor.
PRIMEROS CASOS EN ESPAÑA
Uno de los ejemplos más claros de esta nueva tecnología es el implante osteointegrado femoral, un tratamiento que apenas ha comenzado a aplicarse en España y que permite, según los expertos, una unión perfecta entre el muñón y la prótesis a través de un vástago de titanio que, junto a un espaciador de polietileno de forma redondeada, pasa a formar parte de la estructura del fémur a las pocas semanas de su colocación mediante un procedimiento quirúrgico.
Entre tres y ocho meses después, una vez se confirma que el vástago de titanio y el fémur se han integrado, se puede proceder ya a la segunda fase del tratamiento, que consiste en conectar el tornillo que sobresale del muñón a una pierna artificial, que queda integrada en el conjunto y hace posible que el paciente deje de necesitar apoyos, mejorando además la densidad del fémur, que vuelve a recibir carga, y permitiendo un mayor control de la prótesis.
Según el doctor Delgado Velilla, se obtienen los mejores resultados cuando la osteointegración se realiza en el mismo momento en el que se procede a la amputación en quirófano, siempre que las circunstancias permitan llevar a cabo ambos procesos de forma consecutiva.
Por su parte, el presidente de la Asociación Nacional de Amputados (Adampi), Fernando Otero de Navascués, también presente en la jornada, pidió a las autoridades sanitarias de España que financien estos avances que están empezando a llegar a España "porque son muy beneficiosos para nosotros".
(SERVIMEDIA)
23 Abr 2014
VSR/gja