"He hecho muy mal", indicó en declaraciones a la Cope recogidas por Servimedia. "Yo soy una ciudadana particular, que voy en mi coche particular, que me ponen una multa, la acepto -¡cómo no la voy a aceptar, he cometido una infracción!- y punto. Y ahora, que estos señores quieran inventarse estas historias... Pues bueno, ¡qué le voy a hacer! Ya diré a mis abogados que lo discutan".

Asimismo, puso en duda que el agente de Movilidad que la sancionó esté preparado para este trabajo si sufre un ataque de ansiedad por poner una multa a una señora, "aunque sea yo famosa".

La dirigente popular explicó que al ver que un taxista paraba delante de su coche y observar que en ese mismo lugar había un cajero, pensó -"muy mal pensado, pero lo hice"- que mientras el pasajero pagaba y se bajaba del taxi, le daría tiempo a sacar dinero, "con la mala suerte de que vino un agente de Movilidad y cuando acabé en el cajero, o sea, en medio minuto, ya me había puesto la multa con un aparatito que tienen".

"Este señor me pidió el carné de conducir, entré en el coche, le di el carné de conducir, tomó todos los datos, se tomó su tiempo. Ya había tomado la matrícula y me había puesto la multa. Después de esto me devuelve el carné de conducir y me pide los papeles del coche. Y todo esto interrumpiendo -ahí sí, porque aparecieron seis agentes de Movilidad- el carril bus de la Gran Vía", continuó.

Seguidamente, propuso al agente hacer el papeleo en otra calle, ya que "ahora sí que estamos interrumpiendo de verdad el tráfico, y él me dijo que no, que estábamos ahí muy bien. No le debía preocupar lo del carril bus".

Aguirre narró de esta forma la conversación que mantuvo entonces con el agente: "Me volvió otra vez a pedir el seguro y cuando ya habían pasado quince o veinte minutos yo le dije: ¿Ya tiene usted todo o es que me va a quitar la multa? No, no, no. ¿Pues entonces ya me puedo ir a mi casa, que está aquí al lado? No, porque le voy a dar la copia de la denuncia. Y le digo: Si es que no necesito para nada la copia de la denuncia, tengo prisa y me tengo que ir, llevamos aquí veinte minutos. Y entonces me dice: No, porque la necesita usted para recurrir. Y le digo: Pero si no voy a recurrir. Me han puesto una sanción y ya está, me voy a mi casa. Y al irme a mi casa, una moto que estaba muy mal aparcada en el carril bus, la rocé. La marca es como una uña. Le pegué un poquito, la toqué, la roce y se cayó al suelo la moto. ¡Y que digan estos señores que he arrollado a un policía y que han tenido que ser atendidos...! ¡Esto ya es el colmo!".

Agregó que su casa está a 25 metros de donde se encontraban, por lo que les dijo a los agentes que se iba a su domicilio, donde posteriormente estuvo hablando con ellos, "y no había ningún herido". "Yo no estoy muy segura de que si se tiene un ataque de ansiedad por poner una multa a una señora, aunque sea yo famosa, se esté capacitado para ser agente de Movilidad", puntualizó.

Tras insistir en que ella no se dio a la fuga, como se está diciendo, añadió que pidió disculpas por haber tirado la moto y calificó de "impropio" el comentario que, según su versión, hizo uno de los agentes, que le dijo: "¡Hable usted con Ana Botella!".