Durante la rueda de prensa posterior al último Consejo de Ministros del año, el jefe del Ejecutivo expresó su "satisfacción" por este recorte de la entrada de irregulares en un 50 por ciento. "Se está ganando el combate a la inmigración ilegal despues de haber sufrido en 2006 y 2007 años extraordinariamente difíciles", indicó.

La buena cifra de 2009 ha sido posible, en opinión de Zapatero, "gracias a un despliegue amplísimo de la política de cooperación con los países de origen, la mayoría africanos, con un refuerzo de los medios materiales y personales en la lucha contra la inmigración ilegal".

"No vamos a bajar la guardia", avisó el presidente. "Sabemos que puede haber momentos de repunte, pero, afortunadamente, es un tema de gran calado y preocupación que está en una dirección muy adecuada".