Así, el diputado del PP Ignacio Astarloa explicó que la ponencia ha decidido trabajar “sobre la base de los documentos que están presentando los grupos” y también sobre los que se hicieron en su día, “muy elaborados”, cuando se intentó acometer la reforma del Reglamento.

“Espero de verdad que esta sea la ocasión en que seamos capaces entre todos, y digo todos, absolutamente entre todos, sin que haya ninguna línea roja ni ningún veto ni nada por el estilo, de hacer un nuevo Reglamento completo. Lo espero y lo deseo vivamente”, dijo.

El diputado del PSOE Pablo Martín manifestó que esta reforma del Reglamento “es una de las últimas oportunidades” que tiene la clase política “para poder recuperar parte de la credibilidad y el respeto” que la Cámara Baja merece de parte de los ciudadanos.

Por su parte, el portavoz del Grupo Parlamentario IU-ICV-CHA: La Izquierda Plural, señaló que la modificación del Reglamento de la Cámara Baja “tiene que ser algo más que una reforma cosmética y tiene que ser una respuesta a lo que demanda la ciudadanía”, que es “un Parlamento más abierto, más plural, más democrático”.

La portavoz de UPyD, Rosa Díez, destacó que “lo más positivo” de la reunión de este lunes es que todos los grupos parlamentarios han acordado “que no haya vetos ni líneas rojas”.

PSOE y UPyD entendieron que en esta legislatura se aprobarán aquellas modificaciones del Reglamento del Congreso sobre las que haya acuerdo, quedando para la siguiente los que no. Sin embargo, el PP señaló que “no hay nada fijado y determinado en este momento en esa dirección”.

Por parte del Grupo Parlamentario Mixto intervino Joan Tardà (ERC), quien dijo que su grupo no desearía “que se debatieran en los próximos meses solamente aquellos temas que complacen más a los grupos mayoritarios” y aseguró que su grupo no aceptará que les den “gato por liebre”.

PROPUESTAS

Casi todos los grupos parlamentarios han presentado ya sus propuestas. Así, el PSOE propone ampliar el número de preguntas que los grupos de la oposición pueden formular al presidente del Gobierno en las sesiones de control del Congreso, y quiere también que se regule la obligación del Gobierno de convocar anualmente el Debate sobre el Estado de la Nación.

El Grupo Parlamentario IU-ICV-CHA: La izquierda Plural propone, entre otras cosas, que se regule la participación de movimientos sociales, instituciones y administraciones públicas (por ejemplo, ayuntamientos) en las comisiones parlamentarias sobre temas de su interés y que la Comisión de Peticiones deje de ser una “comisión buzón” para convertirse en otra en la que los ciudadanos tengan una participación más activa.

Por su parte, UPyD propone, entre otras cosas, que los diputados “fichen” y que se establezca “un horario fijo en el reglamento para comenzar la actividad así como para las votaciones con el objeto de mejorar la productividad y la conciliación familiar”.

Por su parte, CiU, al igual ERC, quieren que se regule el uso de lenguas cooficiales en el Congreso de los Diputados.

Por su parte, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y Geroa Bai han propuesto, entre otras cosas, eliminar la obligación de acatar la Constitución y jurarla o prometerla ante la Cámara en el momento en que los diputados toman posesión de su escaño.

Tras la primera reunión de la Ponencia, que tuvo lugar el pasado 12 de febrero, los grupos parlamentarios ya se comprometieron a negociar “sin líneas rojas”.