La Brigada Judicial de Valencia ha detenido a cinco personas por su presunta implicación en un intento de compraventa de órganos. Una de ellas es un acaudalado ciudadano libanés, que, necesitado de un trasplante de hígado, viajó a España para intentar que se le realizara la operación con donantes voluntarios, pero la red presuntamente ofrecía 40.000 euros a inmigrantes sin recursos para que se prestaran a participar en trasplantes ilegales de hígado.

“Ahora hay tanta miseria y pobreza, aunque el señor Rajoy lo quiera desmentir, que éste no va a ser seguramente una excepción, ojalá que sí, pero las personas necesitadas hacen lo que sea, como robar e incluso vender sus órganos, y otros con poder adquisitivo se van a aprovechar de ellas”, afirmó Flores, en declaraciones a Servimedia.

Además, alertó del peligro que supone Internet para estos casos, ya que, según añadió, en la Red se puede “captar a una persona con necesidades a vender nada menos que un órgano suyo con una serie de ‘ofertas’ de que van a facilitarle la vida, no va a tener ningún problema de salud, etc.”.

No obstante, Flores celebró que el primer intento de compraventa haya fracasado porque se trata de un “negocio absolutamente ilegal, inmoral y casi una ruindad”, y reclamó que se refuerce la vigilancia en estas situaciones.