El patrón del consumo varía según la edad y el sexo, y así mientras que en las mujeres fuma un 27,2%, el consumo es casi el doble entre los varones (47,2%).

El porcentaje de fumadores ha descendido ligeramente desde 1987 a 1995, pasando de un 38% a un 37%. Este descenso es especialmente llamativo en el caso de los varones, del 55% al 47,2%.

El conumo de tabaco constituye actualmente la principal causa de muerte evitable en los países desarrollados, ya que todavía más de un tercio de la población adulta persiste en el hábito de fumar.

La última Encuesta Nacional de Salud señala también que la esperanza de vida de los fumadores se ve reducida entre 10 y 15 años, debido a las diversas patologías que produce el tabaco.

El hábito de fumar es la causa principal de enfermedades evitables y muertes prematuras en Europa y en el resto del mundo. Seún estimaciones realizadas, durante 1995 más de 46.000 personas murieron a causa del tabaco en España.