La avería que se detectó en el avión Airbus 310 que trasladó este domingo hasta Honduras al Príncipe para asistir a la toma de posesión del nuevo presidente, derivó en que el Ministerio de Defensa “por precaución” y para asegurarse las “máximas garantías posibles” decidiera este lunes enviar hasta Tegucigalpa al otro Airbus 310 de la Fuerza Aérea para el viaje de regreso, según indicaron a Servimedia fuentes ministeriales.

El envío de esta aeronave, que acaba de pasar la revisión y que este fin de semana participó en el traslado hasta Mallorca del personal del Ejército del Aire desplegado en la misión contra la piratería en Yibuti, ha provocado que la delegación española a Roma se quedase sin avión.

Por ello, para trasladar a las más de 50 personas que forman esta delegación se ha recurrido a dos aviones Falcon, con capacidad para 14 personas, y a un Embraer belga, que ha sido aportado por el Centro de Control de Movimientos en Europa (MCCE).

Según las fuentes consultadas, antes incluso de que se detectara la avería del avión del Príncipe se había alertado a este 'pool' de transporte sobre la posible necesidad de tener que recurrir a este mecanismo debido a la delegación que se desplazaba hasta Roma.

El Departamento que dirige Pedro Morenés, junto con la empresa fabricante EADS, ha iniciado un expediente informativo para analizar si se ha modificado el procedimiento de revisión de los aviones y ello ha derivado en “exceso de celo”.

El avión que llevó hasta Honduras al Príncipe ya está arreglado, indican dichas fuentes, como prueba que don Felipe volara desde República Dominicana, donde hizo escala por la avería, hasta Tegucigalpa, final de su destino.