En la defensa del real decreto, la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, defendió que esta medida permitirá a los trabajadores recibir “mayores prestaciones presentes y futuras”, y reforzará la “sostenbilidad” de la Seguridad Social. Asimismo, sostuvo que ofrece mayor transparencia en la remuneración que ofrecen las empresas, lo que “favorecerá su competencia en el mercado”.

Sin embargo, los principales partidos de la oposición mostraron su rechazo a la convalidación de este decreto. La diputada del PSOE Concepción Gutiérrez retó a la ministra a tener la “valentía” de “retirar esta medida y abrir un auténtico diálogo social”.

“Suspenda sus efectos hasta el acuerdo en el ámbito del diálogo social”, dijo la diputada socialista, quien acusó a la ministra de haber generado “una gran alarma social sin tener en cuenta las consecuencias en el empleo”.

PROYECTO DE LEY

El real decreto convalidado este miércoles, que no será tramitado como proyecto de ley, incluye también los últimos cambios introducidos por el Gobierno en el trabajo a tiempo parcial.

Dentro de las medidas que el real decreto recoge en esta materia se establece una nueva regulación de las horas complementarias, que permitirá que un trabajador a tiempo parcial pueda casi duplicar su jornada habitual.

No obstante, la posibilidad de ampliar la jornada con horas complementarias está limitada por el número de horas ordinarias pactadas y por el modelo de contrato.

Así, la utilización de horas complementarias sólo podrán realizarla los empleados a tiempo parcial con una jornada semanal superior a las 10 horas. Las llamadas horas complementarias pactadas tendrán un límite máximo del 30% de la jornada habitual del trabajador, ampliable hasta el 60% si se pacta en el convenio colectivo.

Por otro lado, los trabajadores a tiempo parcial de carácter indefinido podrán ampliar este límite en un 15% adicional, que puede llegar hasta el 30% si se pacta en el convenio, a través de las horas complementarias voluntarias.