Tras debatir y votar los cambios introducidos en la norma en su tramitación en el Senado, el Congreso acordó remitir el texto al Boletín Oficial del Estado (BOE) para su publicación y posterior entrada en vigor.

Entre las enmiendas introducidas en el Senado se encuentra la ampliación al IPC más medio punto de la subida máxima de las pensiones.

También se incluyó en el texto que el Ejecutivo deberá presentar cada cinco años un estudio sobre los efectos de la reforma en el poder adquisitivo de los pensionistas, que será revisado en el marco del diálogo social y en el Congreso de los Diputados.

Durante el debate, los grupos de la oposición coincidieron en criticar las medidas que se incluye la norma porque supondrá una pérdida de poder adquisitivo de los pensionistas.

Además, lamentaron la falta de diálogo y consenso que ha caracterizado al PP y al Gobierno durante la tramitación de la norma.

En este sentido, la diputada del PSOE Isabel López i Chamosa acusó al Gobierno de crear “alarma social”, pidió al PP que vuelva al Pacto de Toledo y le recordó que esta reforma tiene “fecha de caducidad”.

Será cuando los populares pierdan las elecciones, ya que aseguró “todas las fuerzas del arco parlamentario tenemos el compromiso” de volver a referenciar la subida de las pensiones al IPC.

Por el contrario, la portavoz del PP en el debate, Carolina España, defendió que gracias a la reforma del Gobierno las “pensiones subirán siempre” y “no se van a poder congelar”.

“La prosperidad económica se va a repartir también entre los pensionistas; las pensiones subirán más del IPC y se recuperará la hipotética pérdida de poder adquisitiva que se pudiera tener” en los años de crisis, agregó.