Señaló que “el Gobierno de la Comunidad, como la mayoría de los economistas, defiende que una política presupuestaria eficaz que pretenda estimular el crecimiento de la economía debe apostar por la bajada selectiva de impuestos, en un contexto de imprescindible control del déficit público”.

Afirmó que, con estos presupuestos, “los ciudadanos van a contar con mayor renta disponible, lo que repercutirá de forma sensible en el aumento del consumo, animando a los madrileños a adoptar decisiones económicas más optimistas, lo que acabará repercutiendo en un mayor crecimiento de nuestra economía”.

“Es precisamente ese incremento de la actividad y de la confianza el que va a mejorar los niveles de ingresos públicos de la Administración autonómica” añadió Muñoz Abrines, quien también valoró “muy positivamente el compromiso social del Gobierno regional, que no solo mantiene en los presupuestos el mismo nivel de gasto en servicios públicos tan importantes como sanidad, educación y transportes, sino que aumenta más de un 4% los fondos destinados al mantenimiento de los servicios sociales regionales”.

Explicó que “nos encontramos ante unos presupuestos que conjugan de manera inteligente y equilibrada el necesario estímulo que supone la bajada de impuestos y el cumplimiento del objetivo de déficit con la prestación de servicios básicos de máxima calidad y la atención especial de los ciudadanos que más lo necesitan”.

“La subida de las becas, de los beneficicarios de la Renta Mínima de Inserción y la atención a discapacitados son claros ejemplos de este compromiso”, concluyó.