Los trabajadores de Deloitte forman parte de los equipos de baloncesto masculino y femenino de esta entidad y compiten en una liga de empresas en la Comunidad de Madrid, donde también juegan empleados de Iberia, Iberdrola, Decathlón y Sacyr Vallehermoso.

Sólo uno de los empleados de Deloitte, Eduardo Cañas, que ejercía de capitán de sus compañeros, había practicado con anterioridad el baloncesto en silla de ruedas, en una exhibición en Santo Domingo de la Calzada (La Rioja).

El resto se estrenaron en esta modalidad paralímpica en la cancha del Colegio San Agustín, de Madrid, donde abogados, fiscalistas, auditores y consultores rodaron con varias "estrellas" de este deporte, como el estadounidense Joshua Turek, el inglés Terry Bywater, el australiano Shaun Norris y el español Rafael Muiño.

El encuentro estuvo plagado de constantes violaciones al reglamento, como siete jugadores contra cinco, más de tres segundos en la zona o incluso ponerse de pie para lanzar a canasta.

Los jugadores del Fundosa ONCE "ayudaron" a los trabajadores de Deloitte y al final se retiraron de la cancha para dejar a sus eventuales contrincantes que disfrutaran del baloncesto en silla de ruedas.

José Luis Díez, socio de Recursos Humanos de Deloitte, explicó a Servimedia que esta iniciativa surgió tras la firma de un convenio de colaboración entre esta entidad y la Fundación ONCE.

En virtud de este acuerdo, firmado el pasado mes de septiembre, Deloitte se adhiere al programa Inserta de la Fundación ONCE con el compromiso de incorporar a su plantilla a 20 personas con discapacidad en los próximos tres años.