El parlamentario socialista Antonio Trevín se refirió a este asunto en la Comisión de Interior de la Cámara Baja, donde esta mañana compareció el ministro Jorge Fernández Díaz para explicar la respuesta policial al asalto contra el centro Blanquerna.

Trevín pidió al Ejecutivo que no haya ni “complacencia” ni “complicidad” con el “franquismo sociológico”, que tachó de “lacra social”. En este sentido, reclamó que se analice si están cumpliendo la Ley de Partidos formaciones ultraderechistas como Alianza Nacional.

Además, Trevín demandó a Interior que investigue la “gran movilización” que, al parecer, grupos de extrema derecha están preparando en Barcelona de cara al próximo 12 de octubre con motivo de la fiesta de la Hispanidad.

El llamamiento del PSOE a tomar medidas más contundentes contra la extrema derecha en España fue compartido por la mayoría de los partidos de la oposición, en concreto por CiU, PNV, IU y ERC.

En concreto, Emilio Olabarria, del PNV, dijo que es una “obligación moral y política” del Ejecutivo hacer frente al aumento de la extrema derecha en España, algo que dijo pasa, en primer lugar, por dar al problema la dimensión real. Al mismo tiempo, este parlamentario planteó analizar la eventual ilegalización de partidos de extrema derecha.

Esta tesis fue compartida por Joan Coscubiela, de Izquierda Plural, quien reclamó no minimizar el riesgo de la extrema derecha y tener en cuenta que hay un determinado “espectro ideológico del franquismo” que se siente “representado” por el PP.

A su vez, Ricardo Sixto, también de la Izquierda Plural, sostuvo que la extrema derecha “se está reorganizando en España” y pidió la ilegalización de sus partidos afines, puesto que son “extremadamente peligrosos”.