Hizo esta petición por las “irregularidades que se están produciendo en el proceso y por la opacidad con que los gobiernos municipales y autonómico del PP están actuando”.

Franco, que hizo estas declaraciones tras reunirse con los portavoces socialistas de los municipios afectados por la nueva línea de alta tensión, consideró “ilegal” y “fuera de toda planificación objetiva” este proyecto, que “sólo responde a intereses pocos claros que el PP está gestando a espaldas de los vecinos, perjudicando claramente a una parte muy importante del territorio autonómico que es clave a nivel medioambiental en Madrid”

Reiteró que “solicitamos la inmediata paralización de dicho proyecto, así como la apertura de un debate amplio y transparente sobre las necesidades energéticas de la Comunidad de Madrid”.

Explicó que las comunidades autónomas tienen que elaborar las previsiones energéticas y el Gobierno central debe aprobar la planificación tomando como base el escenario macroeconómico actual y las previsiones de demanda”.

A su juicio, “estas circunstancias no se dan en este proyecto, puesto que su origen se retrotrae a 2005 y puesto que ha sufrido muchas vicisitudes por su falta de encaje y deficiencias de todo tipo que no se han subsanado”.

Explicó que según lo establecido en la Ley sobre el Transporte de Energía, “no se puede dar ninguna autorización de instalación de redes de transporte de energía eléctrica salvo que haya circunstancias excepcionales que tengan que ver la existencia de riesgo inminente en el suministro”, que en este caso “no se dan”.

Además, dijo que desde el punto de vista medioambiental, este proyecto es “absolutamente insostenible”.

“No debemos olvidar que afecta directamente al Parque Regional del Guadarrama, que goza de la máxima protección, y perjudica de forma sustancial a los pequeños municipios de la zona”, añadió.