En una entrevista a la Cadena Cope, recogida por Servimedia, Mayor Oreja recomendó "no sorprendernos" con los pasos que está dando la Generalitat puesto que "está siguiendo la hoja de ruta" que el nacionalismo independentista siguió previamente en Euskadi con el terrorismo de ETA y el Plan Ibarretxe.

"El movimiento nacionalista hoy tiene una vanguardia que es el gobierno de Cataluña, de la misma manera que ETA fue vanguardia en los años 80 y 90", dijo. "A veces la ofensiva estaba en un grupo terrorista ETA y tenía el centro en el País Vasco. Hoy la ofensiva nacionalista es otra, el movimiento nacionalismo es el mismo. Hoy la ofensiva nacionalista está en Cataluña, no es ETA, es el gobierno catalán el que está en la ofensiva, pero el movimiento es el mismo".

Mayor Oreja matizó que "no hay concomitancias" entre Artur Mas y ETA pero sí insistió en que "el movimiento nacionalista es el mismo" y advirtió de que lo que ahora está sucediendo en Cataluña "está en la esencia, en la genética y el núcleo del nacionalismo".

Apuntó que en ocasiones, como tras la cadena humana organizada con motivo de la Diada, estos movimientos "parecen imparables" pero manifestó que "en el fondo es la misma ofensiva" nacionalista de siempre y que el fondo del problema es "el mismo" que siempre ha tenido España.

"El punto débil de España es la nación, en Italia es el desorden, en Gran Bretaña es el aislamiento, y en Francia es la fractura de sociedad", adujo antes de advertir sobre el peligro que conllevaría permitir un referéndum independentista en Cataluña. "Yo tendría un gran cuidado... ¡Los experimentos, con gaseosa!".

Mayor Oreja tachó de "disparate" abrir la puerta a una consulta soberanista en Cataluña dado que daría paso a la "destrucción de España" y pondría en marcha un proceso de "balcanización" en la Península, al estilo de lo que pasó con Yugoslavia en la década de los 90.