Durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, Báñez destacó que estos datos deben analizarse con "toda la prudencia, pero también con toda la esperanza".

En este sentido, estimó que la última reforma del mercado de trabajo impulsada por un Gobierno socialista dio lugar a más de 730.000 parados.

Por ello, Báñez criticó que el Grupo Socialista ya no le pregunte en las sesiones parlamentarias por el desempleo. "Como lleva seis meses bajando el paro registrado, por eso el PSOE no pregunta", destacó.

No obstante, la ministra reconoció que "no estamos satisfechos y seguimos trabajando para que todos los desempleados tengan oportunidades".

Ante ello, la diputada socialista Patricia Blanquer respondió que el Gobierno "no está consiguiendo acabar con el paro porque agosto ha cerrado con nuevo récord de parados.

"Estamos en niveles históricos de paro y es intolerable, una burla y una falta de respeto a los ciudadanos", aseveró la diputada socialista, quien subrayó que "no existen datos para estar contentos y hay mucha gente que lo está pasando mal".