Olabarría se felicitó, en declaraciones a Servimedia, de que una persona como Ángela Bachiller, "con ese nivel de discapacidad, haya adquirido un puesto de dimensión política relevante, por lo que el hecho tiene de trascendente" para demostrar que las personas con discapacidad tienen derecho a "desarrollar todas sus expectativas", como de hecho reconoce la Convención de Naciones Unidas.

No obstante, el portavoz del PNV advitió de que "no deja de ser llamativa la dimensión mediática" que ha adquirido este hecho por su "excepcionalidad", algo que "revela que es un tema que aún no tenemos bien resuelto y que el derecho de participación en los asuntos públicos no se ejerce en condiciones de igualdad".

Desde su punto de vista, la presencia de una concejala con síndrome de Down "debería ser algo más natural". Según argumentó, el que no lo sea es algo "absolutamente contradictorio" con la citada Convención de la ONU.

Y, sin embargo, continuó, este texto, por tratarse de un tratado internacional firmado por España y por la primacía del Derecho Internacional sobre el estatal reconocido en la propia Constitución, debería ser de obligado cumplimiento.

Olabarría, quien expresó el compromiso del PNV a trabajar con el Cermi "en lo que ellos nos pidan", lamentó que la agenda política española está "focalizada por otros temas" y que los relativos a la discapacidad hayan sufrido "cierta decadencia" en los últimos tiempos, cuando "no se pueden olvidar".