En el segundo trimestre del ejercicio la operadora registró un beneficio neto de 1.154 millones de euros, lo que supone un 13,1% menos que en 2012.

En cuanto a los ingresos, la facturación de Telefónica se situó en 28.563 millones de euros en la primera mitad del año, un 7,8% menos. Esta caída se explica por el retroceso registrado por la operadora en Europa (-11,2%) y en el apartado de otras sociedades y eliminaciones (47,9%), ya que, aunque la cifra de negocio también cayó en Telefónica Latinoamérica (-1,9%), la reducción de los ingresos en esta región fue menor.

A pesar de la intensificación en la caída del beneficio en comparación con el ejercicio anterior, los resultados del segundo trimestre del año están “en línea con las estimaciones internas” de la operadora, por lo que “permiten reiterar lo objetivos operativos y financieros fijados para 2013”.