Esta evolución de la economía, provocada por la necesidad de consolidación fiscal y el alto nivel de endeudamiento del sector privado, provocará que la tasa de desempleo siga creciendo y alcance el 28%, antes de estabilizarse.

Por el contrario, la empresa de recursos humanos sí que considera que la inflación y la presión derivada del crecimiento de los salarios de los ocupados “permanecerán controladas”.

Ante esta situación, Randstad recomienda al Gobierno que acometa una nueva reforma laboral que esté “orientada a resultados” y que incluya el refuerzo de la eficiencia y el enfoque de las políticas de empleo.

También debería recoger la “plena” puesta en marcha del portal único de la UE y que se acelee la implementación de la cooperación público-privada en la intermediación laboral, para “asegurar la efectividad de su aplicación en 2013”.

Asimismo, considera que “una de las principales recomendaciones para que mejore la situación del empleo reside en finalizar la evaluación de las reformas del mercado laboral cubriendo el total de sus objetivos y medidas”.

En cuanto a los servicios públicos de empleo, Randstad aboga por “reforzarlos y modernizarlos con el objetivo de asegurar una asistencia individual a los desempleados de acuerdo a sus perfiles y necesidades formativas”.