Según ha informado el teniente de alcalde de Economía, Hacienda e Innovación, Julio Martínez, la ampliación del plan es uno de los "grandes aciertos del gobierno central, en materia económica, ya que eliminará la deuda actual, de carácter no tributario, que el Gobierno de las Islas Baleares tiene con el Ayuntamiento de Palma y que procede, fundamentalmente, de la deuda acumulada por el anterior ejecutivo con la institución municipal, a lo largo de la pasada legislatura".

Esta deuda, en concepto de transferencias de capitalidad, subvenciones y otros, se encuentra en torno a los 40 millones de euros y, según ha explicado Martínez, "no se pagarán directamente al Ayuntamiento de Palma sino que será el consistorio quien enviará al gobierno la lista de proveedores con los que se tienen pendientes pagos, hasta el día 31 de mayo".

De esta manera, ha explicado el teniente de alcalde, "el gobierno pagará directamente a los proveedores que, de manera voluntaria, se adhieran a este plan de pago, siempre y cuando renuncien a los intereses de demora, lo que permitiría reducir los plazos de pago hasta en 2 meses".

Para agilizar todo el proceso, en las próximas semanas, el ayuntamiento se pondrá en contacto con sus proveedores para informarles convenientemente.

Martínez ha valorado muy positivamente esta medida, aunque "supondrá un esfuerzo para el municipio, debido al incremento del gasto financiero que hasta ahora asumían los proveedores, porque el plan conlleva un cambio de deuda comercial por deuda bancaria".