En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Fernández de la Vega comentó que el Ejeuctivo trabaja ya en la reforma de la Ley de Libertad Religiosa y que para el próximo año presentará el anteproyecto que adecuará esta norma al "pluralismo" de la sociedad y a sentencias del Tribunal Constitucional y del Tribunal Europeo de Derechos Humanos sobre los crucifijos.

Destacó que la futura norma "pretende avanzar en la laicidad que la Constitución otorga a nuestro Estado y, sobre todo, en un reconocimiento y protección de los derechos de todos y cada uno de los ciudadanos, independientemente que practiquen o no una religión y sea cuál sea ésta".

La tesis del Gobierno es que no hay contradicción entre lo manifestado por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de que no está entre sus prioridades eliminar los crucifijos de las aulas, y la iniciativa aprobada por el Congreso de los Diputados que insta al Ejecutivo a esta retirada, pero no establece plazos.