Las funciones que estos voluntarios han desarrollado en el terreno han sido varias. Por un lado, instalaron un punto de filiación de afectados y un albergue provisional, por donde pasaron 143 personas. 55 de ellas han pasado la noche en el albergue, mientras que el resto pudo alojarse en casas de familiares y vecinos de la zona.

Por otro, atendieron e informaron a otras 93 personas que decidieron no acceder al recinto de la plaza de toros, donde estaba el albergue. Finalmente, miembros de Cruz Roja Juventud se hicieron cargo de los ocho menores alojados durante el dispositivo, para quienes organizaron actividades de ocio y tiempo libre.

A partir de esta tarde y en los próximos días, la organización tiene previsto desplazar a la zona un equipo de apoyo psicosocial para realizar el seguimiento y potenciar la recuperación de las personas afectadas por el incendio.