La niebla fue haciéndose menos densa conforme avanzaba la mañana de hoy, con lo que a primeras horas de la tarde ya no se procedía a suspender más vuelos, aunque el retraso medio acumulado era de 39 minutos. Al mediodía de hoy, la visibilidad era de 1.500 metros, frente a solo doscientos de ayer.

Los responsables de Barajas no descartan, sin embargo, ue la niebla vuelva a adensarse a última hora de la tarde y por la noche, por lo que recomiendan a todos los pasajeros que se pongan en contacto con sus compañías para confirmar los vuelos.