En una comparecencia pública en Barcelona, en la sede del Govern, Mas detalló su Pla de Govern 2013-2016, que prevé como principio general afrontar la gestión gubernamental hasta final de legislatura, toda vez que mantenga el suficiente respaldo. Es decir, si ERC deja de apoyarle, se replantearía el propósito anunciado este martes.

De este modo, deseó negar la idea que si la consulta soberanista se convoca antes del final de legislatura esta acabaría: nada de eso. Sea cual sea el resultado, Mas seguirá al frente de la Generalitat.

“Nuestro mensaje hoy es que como la legislatura tiene vocación de permanencia, como que es fácil que se celebre la consulta en 2014, la legislatura llegará al final” y, advirtió, “solo una cosa podría alterar ese calendario, y es que perdiésemos los acuerdos estables” que sustentan actualmente su gestión.

Así, no habría legislatura completa “si quedáramos en minoría en el Parlament y no hubiera posibilidad de rehacer ninguna mayoría”, pero si no es así, y espero que no sea así, esta legislatura tiene esta vocación de permanencia”.

Mas expresó de nuevo su convencimiento de que “cuando llegue el cambio de tendencia” esperado, es decir, que una mayoría amplia respalde la independencia de Cataluña, ello “nos alcance como país lo mejor preparados posible”, porque “el cambio de tendencia llegará”, aseveró, “y sabemos que eso se producirá”.

ESTRUCTURAS DE ESTADO

Mas no desaprovechó la ocasión para reiterar lo que ha venido en llamar proceso de “transición nacional”, que incluye los “instrumentos necesarios para cumplir el mandato parlamentario y gubernamental de sacar adelante la consulta sobre el futuro de Cataluña.

Así, además de la Ley de consultas, que se está tramitando en el Parlament, el Govern ha creado el Consejo Catalán para la Transición Nacional, como órgano de impulso, coordinación, participación y asesoramiento que tiene que garantizar el impulso y la materialización del ejercicio del derecho a decidir.

En el proceso de construcción de estructuras de Estado, en el ámbito fiscal el Gobierno catalán avanzará, como ya se conoce, en la asunción de funciones y competencias de la Administración Tributaria a través de un plan directivo y de un proyecto ejecutivo, y emprenderá también el Plan de diseño de la Administración y la Tesorería de la Administración Social catalana.

TERMÓMETRO DE UN PUEBLO

Mas aclaró que “todo el mundo sabe” que la consulta sobre el derecho a decidir “es solo un termómetro claro de la opinión de un pueblo” y “conocer eso ha de ser obligatorio cuando los movimientos sociales van en esa línea”, opinó.

“Se trata de poner la voluntad política para que la población pueda ser consultada y, a partir de aquí, los políticos se han de poner a trabajar para que esa posición mayoritaria sea una realidad”, agregó.

Denunció que Cataluña atraviesa “el momento de mayor dependencia” del Gobierno español “desde el punto de vista de las finanzas públicas”, que, subrayó, “son el dinero” de los servicios públicos esenciales, como la sanidad, la educación, la policía o las prisiones: “Estamos llegando al límite” de la austeridad”, avisó.

En el ámbito económico, aclaró que "nuestro mercado principal ya no es España: es el mundo", y de eso, dijo, ya se han dado cuenta las empresas, que no ven necesariamente al Estado español como su principal destino.