Economía Sostenible. Blanco afirma que "no podemos permitirnos ser conservadores"

- La nueva ley "no es una varita mágica", afirma

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Fomento, José Blanco, afirmó hoy que la Ley de Economía Sostenible, que hoy presenta el presidente del Gobierno en el Congreso, “no es una varita mágica que cambiará nuestro modelo productivo de la noche a la mañana”, ya que “los milagros en economía no existen”. A pesar de ello, dejó claro que “hay una cosa que ni Gobierno ni empresarios podemos permitirnos: ser conservadores”.

Blanco pronunció un discurso inaugural en la Conferencia Empresarial 2009, organizada por CEOE, centrada en los “Caminos para la recuperación y el empleo”, en el que criticó a quienes “antes, nos vendieron como milagro lo que no era más que una burbuja inmobiliaria gigantesca”.

La nueva ley, cuyo anteproyecto aprobó el Consejo de Ministros el pasado viernes, es “un instrumento para promover actividades rentables para empresarios y para el país, capaces de generar empleo de calidad y estable, reducir la dependencia energética y fortalecer nuestra posición en la esfera internacional”.

Expresó, asimismo, su malestar hacia quienes “cuatro días después de la presentación de la ley y sin aún conocer la estrategia”, lanzan críticas que “han quedado en lo de siempre, en el chascarrillo”.

Para el titular de Fomento, “es más difícil acoger nuevas ideas que aferrarse a las viejas”.

“Podemos construir nuestro futuro o dejar que los acontecimientos lo hagan; quedarnos en el viejo debate o ir hacia delante y hacer frente a este reto juntos. El mundo está cambiando muy rápido y nuestra tasa de aprendizaje debe ser al menos igual”, dijo Blanco.

“Si hay algo que no podemos permitirnos es ser conservadores: conservar un sistema financiero desprovisto de todo control; conservar la burbuja inmobiliaria; la administración lenta y burocratizada; una economía dependiente de combustibles fósiles que destruyen la tierra, contaminan el mar y envenenan el aire; un sistema de transporte altamente contaminante y poco eficiente. No podemos conservar, a todas luces, lo que ha fracasado”, porque “España no es un país de resignados”, sino que “siempre ha progresado cuando colectivamente ha sido capaz de ambicionar el cambio”.

Apostó, en este sentido, por el cambio de la mano de la nueva norma y con la colaboración de los empresarios.”Sin la implicación y colaboración de la fuerza empresarial no hay posibilidad de renovar la economía”, añadió.

ACTUACIÓN

Blanco defendió la actitud proactiva del Gobierno en el actual contexto de crisis. "Podíamos elegir entre ver cómo los bancos quebraban o actuar coordinadamente para salvar el sistema financiero”; entre “dejar que la inversión privada se viniese abajo sin hacer nada o pisar el acelerador de la inversión pública e inyectar liquidez para salvar empresas y empleos”; entre “resignarnos a estar como estábamos o apostar por ocupar un puesto en el G-20”. En todos estos casos, “hemos hecho lo segundo y vosotros”, esto es, los empresarios, “lo habéis apoyado”.

Aludió, a este respecto, a las obras del Fondo Local, a la obra pública, y a las demás iniciativas del Gobierno, posibles gracias a “los impuestos, los recursos de todos los ciudadanos”. “Unos pueden decir que en España pagamos demasiados impuestos y otros pueden decir que son insuficiente, pero lo cierto es que pagamos menos que los países de nuestro entorno y que hemos sido el segundo país europeo en el que más bajó la presión fiscal en 2008”, esgrimió.

(SERVIMEDIA)
02 Dic 2009
CCB/gfm