Sáenz de Santamaría aclaró este detalle durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en el que se estudiaron sendos informes sobre los anteproyectos de ley que está preparando el Ejecutivo sobre las nuevas leyes de consumidores y evaluación medioambiental.

La vicepresidenta indicó que la Iglesia tendrá que acogerse a la Ley de Transparencia como cualquier institución "que recibe fondos públicos mayoritariamente" y que se financia en gran medida a través de esta vía, como sucede con la casilla de la Declaración de la Renta para la Iglesia católica.

Explicó que no ha habido conversaciones expresas con la Iglesia sobre este asunto, dado que "podríamos enumerar un sinfín de instituciones y entidades que van a entrar" en la futura Ley de Transparencia.

Sáenz de Santamaría señaló también que hay "un número importante" de organizaciones que tendrán que cumplir los requisitos de la Ley de Transparencia, aunque con un régimen diferente porque estaba pensando inicialmente para las administraciones públicas.