En concreto, estos servicios de mediación atendieron 124.325 demandas por despido entre enero y agosto, frente a las 97.502 del mismo periodo de 2008, año que se cerró con la cifra más elevada de demandas del último lustro.

Además, la tensa situación que atraviesan las empresas y la negociación colectiva ha provocado que este incremento en las demandas se haya concentrado en aquellas que no logran un acuerdo entre las partes y que, en su mayor parte, terminan en los juzgados.

Así, mientras que aquellos casos que se cierran con avenencia han disminuido ligeramente hasta agosto, pasando de 30.446 a 30.232; en los que no hay acuerdo han aumentado un 43% hasta los 86.652.

La mayor parte de estas demandas sin avenencia (48.514) se cerraron debido a que la empresa no se presentó al acto de conciliación, y el resto (38.138) por la ausencia del trabajador.

En cuanto a las cuantías pactadas en los casos que hubo acuerdo entre las partes, entre enero y agosto se fijaron un total de 1.216,4 millones de euros en indemnizaciones, frente a los 1.127,6 del ejercicio pasado.

En estas cifras del Ministerio de Trabajo no se recogen las conciliaciones y mediaciones resueltas por los organismos de mediación que no forman parte de la administración pública y que están integrados por organizaciones empresariales y sindicales.

Entre estos organismos se incluye el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA), que, a pesar de estar tutelado por el Ministerio de Trabajo, es el organismo no administrativo que se encarga de desarrollar el Acuerdo sobre solución Extrajudicial de Conflictos (ASEC), para la mediación en grandes conflictos colectivos.