Sáenz de Santamaría se refirió así en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros a los ataques que han padecido algunos políticos del Partido Popular, como los diputados Esteban González Pons en Valencia y Antonio Gallego en Barcelona.

"La gente puede expresar su opinión pero hay que ser muy conscientes de que hay derechos de otros que hay que respetar", dijo. "Los derechos en este país no son ilimitados, acaba el derecho de uno cuando empieza el derecho de otro".

Sáenz de Santamaría apeló en particular a los derechos de "las familias" de los políticos que han sufrido estos ataques recientes y lamentó que "en determinadas prácticas se invaden los derechos de otros".

A su juicio, quienes realizan ese tipo de protestas "están conculcando los derechos de otros" y están vulnerando "el derecho a la intimidad que tiene todo el mundo".

La vicepresidenta y portavoz del Gobierno hizo un llamamiento "a la prudencia y a la moderación" con el fin de "respetar" los derechos de los políticos, y especialmente de sus familias, que han sufrido manifestaciones antes sus casas en los últimos días.

"Si uno se quiere manifestar hay muchos sitios para manifestarse", dijo. "Uno no puede defender sus derechos o los de otros de esta manera". "Lo que no tiene ningún sentido es decir que se defiende a otro cuando lo que se está haciendo es invadir los derechos de otras personas y de otras muchas personas que no tienen nada que ver con esto".

Finalmente, Sáenz de Santamaría adujo que el Parlamento "es buen sitio para debatir" y reprochar a los dirigentes políticos sus decisiones pero recalcó que "en las casas particulares de otros no creo que sea el entorno" para atacar a nadie.