La cinta se centra en la afición a jugar a los bolos de un grupo de jóvenes que viven en una residencia de la localidad de Camden gestionada por la Fundación Sylvanvale, una organización que presta ayuda a 600 personas con discapacidad intelectual en Australia.

Aaron McMahon, que tiene parálisis cerebral, es uno de los participantes en esta iniciativa, y confía en que contribuya a mostrar a las personas con discapacidad "como miembros de la sociedad con los mismos derechos y a erradicar la discriminación".

Pauline Stanley, directora de la Fundación Sylvanvale, subraya que la filmación de la película ha sido una experiencia muy positiva para las personas a las que prestan ayuda, ya que les ha brindado la oportunidad de expresar su creatividad y colaborar con artistas locales.

La película se exhibirá en los cines de Camden, junto con otras siete que también se centran en la discapacidad, en el marco de los actos organizados con motivo del Día Internacional de la Personas con Discapacidad, que se celebra en todo el mundo el próximo 3 de diciembre.