Ariztegui, que estuvo declarando durante casi cuatro horas en calidad de testigo ante el instructor de la causa, el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu, aseguró que cuando el Banco de España perdió el control, el departamento de De Guindos asumió “un protagonismo que es público y notorio”. Estas supuestas gestiones del Ministerio de Economía en Bankia alcanzaron tal magnitud que el Banco de España llegó a pedir a sus servicios jurídicos un informe para saber si estas injerencias eran legales. Ariztegui, según señalaron fuentes jurídicas, explicó que se trataba de una situación inédita, que no se había producido nunca. Los servicios jurídicos dijeron finalmente que la situación era extraordinaria pero no ilegal.

NUEVO PLAN DE SANEAMIENTO

Ariztegui, que fue además presidente de la Comisión Rectora del FROB hasta el 15 junio 2012, fue preguntado en esta sentido por el nuevo plan de saneamiento que Economía exigió al anterior presidente de Bankia, Rodrigo Rato. El antiguo subgobernador dijo ante el juez que el Banco de España tuvo conocimiento de esta petición pero no participó en su gestación.

Rato, en su declaración como imputado el pasado 20 de diciembre, reveló que el ministro le exigió a finales de abril pasado un nuevo plan de saneamiento para la entidad en el que se contemplase un escenario económico catastrófico. Este proyecto estratégico fue exigido después de que el Banco de España aprobase el 17 de abril de 2012 el primer plan de saneamiento de Rato. El departamento de Luis De Guindos acabó rechazando este segundo plan a principios de mayo, lo que llevó a Rato a dimitir.

Ariztegui dijo haber tenido conocimiento de las dos reuniones (27 de abril y el 3 de mayo) que algunos técnicos del Banco de España mantuvieron con el equipo de Rato.

El testigo explicó además que el órgano regulador no llegó a aprobar este plan ya que le llegó “de forma informal” días antes de la dimisión de Rato, que fue anunciada el pasado 7 de mayo. Aún así explicó que, al aprobar el plan inicial de Rato el 17 de abril, el Banco de España incluyó una mención en la que pedía a Bankia “plan de actuaciones complementario” en el que debería incluirse “decisiones a corto plazo de racionalización y refuerzo en sus estructuras de administración y gestión” así como “un programa ambicioso de desinversiones a realizar en un periodo de tiempo razonable que reduzca su dependencia de los mercados mayoristas”. Ariztegui, ante las preguntas del abogado de Rato sobre esta mención, reconoció que se estaba pidiendo a Bankia más saneamiento.

INTEGRACIÓN DE BANCAJA

En el interrogatorio como testigo a Ariztegui también se hizo referencia a la integración de Bancaja en Bankia. El exvicepresidente de la entidad José Luis Olivas, en su declaración como imputado el pasado 19 de diciembre, aseguró que Ariztegui y el antiguo gobernador del Banco de España Miguel Ángel Fernández Ordóñez le obligaron a integrar a Bancaja, de la que era presidente, en Bankia. Olivas dijo que, en una reunión celebrada el 2 de junio de 2010, Fernández Ordóñez y Ariztegui le conminaron a integrar Bancaja y le llegaron a amenazar con una intervención de Bancaja si no aceptaba.

Ariztegui reconoció hoy esta reunión pero negó que se amenazase a Olivas con una intervención y explicó que fue una simple “invitación”.

LINDE Y FERNÁNDEZ ORDÓÑEZ

El plato fuerte de las declaraciones de esta semana llegará el jueves, cuando deberá comparecer en la Audiencia Nacional en calidad de testigo el antiguo gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez. Al día siguiente, viernes, declarará como testigo su sucesor al frente del organismo regulador, Luis María Linde.

El juez Andreu ha citado para la próxima semana, también en calidad de testigos, al actual presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri; al socio de la auditora Deloitte Francisco Celma, y al presidente de Lazard, Jaime Castellanos.

El titular del Juzgado de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional también había citado para el próximo 18 de febrero al ministro de Economía, Luis de Guindos, pero éste ha comunicado al magistrado que declarará por escrito debido a sus “múltiples obligaciones”.

La declaración por escrito es una posibilidad que la ley otorga, entre otros, a los ministros del Gobierno cuando son llamados como testigos.

El juez Andreu acordó estas citaciones el pasado 1 de febrero y después de interrogar en calidad de imputados a 33 exconsejeros de Bankia y su matriz, BFA.