En la comparecencia de la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, en el Congreso de los Diputados, Erkoreka reconoció que el Ejecutivo "ha desempeñado un papel importante" en la resolución del secuestro, pero precisó que la gestión fue "manifiestamente mejorable".

Denunció que ha habido "descoordinación y falta de reflejos" en el Gobierno y se ha echado en falta una pauta de actuación común. La gestión, sentenció, ha sido "titubeante" y se ha reaccionado "cuando el daño ya estaba hecho y era irreversible".

Secuestrado el "Alakrana", aseguró, el Gobierno optó por "defenderse atacando", poniendo en marcha una "inmensa maquinaria de propaganda e intoxicación" que se dirigió primero a los armadores, después a quienes reclamaron, como el PNV, el embarque de militares en los pesqueros y luego también a los propios marineros, al sugerir que ese riesgo "va en el sueldo".

Erkoreka se mostró convencido de que el traslado a España de los dos piratas pretendía emitir un mensaje "de contundencia" y con ello el Gobierno "antepuso su imagen a la rápida y eficaz resolución de la crisis".